jueves, 14 de mayo de 2009
Pavo real sin abanico de colores.
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Hasta para fardar hay que saber estar
con cuna artesana hecha a mano
y categoría sin darse importancia
llegando a la altura sin subirse alto,
pasando como sin pasar -pero pasando-.
...Y pasa "la princesa" mostrando estela
cultivando esas miradas rendidas,
presumiendo por ser inventadora de futuro
-como a tiro pasado que ha encontrado blanco-
y las despierta de su propio aburrimiento
sin saber distinguir el claro del oscuro
y menos todavía esos colores que saben seducir,
...en sus propios argumentos caducados
entregadas a esa estela que se borra al pasar
en su propio alardeo de pavo real...
sin abanico de colores, ni plumas al viento
en sus claroscuros que vuelan bajo
...-por volar- y es un decir, sin levantar un palmo
del suelo que es su sitio -por mucho que pavonee-
con la cola para esas miradas,
...y desempolvadas las alas para pasear
sin saber volar, ni estilo para llevarlas
-en un querer y no poder- por no saber,
oliendo a plumas de florero de pega
esperando agua perfumada que alivie sus penas
-ocultando solo en el alardeo su condena-
pasando de largo -hoy sin palabras-
con la clase baja -y la cabeza bien alta-
como corresponde "a una princesa"
aunque sea entronada por un día.
Y sorprende a esas miradas
para que tengan de que hablar
y provoca el futuro que era de lo que se trataba.
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9/5/09
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NO HAY NADA PEOR QUE UNA PERSONA ENGREIDA, Y SI ENCIMA ES UN DIA AISLADO PORQUE VA CON EL GUAPO SUBIDO -ME REPATEA- Javier
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