Gracias por tu confianza.

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...Y qué sorpresa ¡ahí aparece La Reina!
la más guapa hasta donde la deja su sencillez.
-Se me retrasa-, como corresponde
a Una Reina en uso de sus prebendas...
esas que son "privilegios de Las Grandes"
que saben llevar el peso de Sus Deberes
por haber nacido con distinta sangre
y una Insignia en El Corazón que es de todos
-puertas a la calle " Tus ojos bondadosos"-
que sufren y piden consuelo y ayuda
por esas lágrimas contenidas
que dan brillo a tus ojos de diamantela
y las sorbo porque son de vida
con sangre noble -esa de regalar-
que aunque no lo quieran ahí están
y las sorbo llenándome de ellas y las pulo
y las baño en plebeyas -solo un poco-
para que pasen desapercibidas -y no dañen-
en ese camino populachero ingrato
al que no todas Las Reinas...se atreven a bajar.
Lágrimas contenidas de bondad
en esa mirada preciosa -regia-
que mira, que se mete y comprende
y manda a su mejilla que diga a su sonrisa
que regale complaciente...
y deseosa de reír como una niña
sin que le pidan cuentas Por Ser Una Reina,
-que no le hagan llorar diamantela-
y encerrarse en palacio entre lágrimas contenidas
"de Ojos Bondadosos" "con Sonrisas para regalar".
-Esta vez...se camuflara de plebeya y escapara-.


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12/5/09

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Para mi sobrina Raquel, porque un día comimos juntos y charlamos -no me dejó pagar-. Le prometí un poema.-Javier

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